Arnau Blanch: “Pintamos la mierda de oro, pero sigue oliendo a mierda”

31/05/21, San Sebastián. Arnau Blanch y Eric Griso, los componentes del grupo Arnau Griso, han estado este domingo 24 de enero actuando en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián.

Cultura. Íñigo Frías, Laura Villanueva. Leer+

Laura.- En primer lugar, para conoceros más, contadnos cómo surgió la idea de crear el grupo Arnau Griso y qué puntos tuvisteis en común al decidir crear este dúo


Eric.- La idea no surge, creo que es algo que fluye. La verdad es que la relación con Arnau ha estado marcada por la música desde el minuto uno. Nos conocimos yendo a una fiesta en mi coche y creo que las primeras palabras que empezamos a cruzar, fueron sobre música.


Arnau.- Bueno seguramente lo primero nos preguntamos si queríamos ron o whisky.


Eric.- (Risas) Sí. Empezamos hablando de sus maquetas de hip hop en aquel momento, que las montaba todas él, muy “home studio”. Entonces, le dije que yo tocaba la guitarra, y que nos juntásemos cuando se nos pasase la resaca.


Iñigo.- Empezasteis a subir vídeos a Youtube en 2011 y ya en 2018 salió vuestro primer disco “Revolución Bananera” que tuvo tanto éxito que llegó a ser el número dos en las listas de ventas de España. ¿Qué significó esto para vosotros? ¿Cómo os sentís al saber que tanta gente os apoya y escucha vuestras canciones?


Arnau.- Es raro, sobre todo porque son cifras en una pantalla. Cuando realmente lo entiendes y eres consciente de lo que implica todo este éxito es cuando vas a un concierto y en vez de números hay personas. Esas masas sí que las puedes cuantificar de forma más realista. Ahí es donde alucinas y dices “yo creo que se han equivocado de sala: venían a un concierto de Bisbal y se han encontrado con estos parguelas” (risas). Al principio te sientes un poco abrumado porque no terminas de entenderlo, pero después, agradeces a la vida toda esta suerte tremenda. Además, te sientes con ganas de superarte y de hacer las cosas cada vez mejor.


Laura.- Estuvimos viendo el proyecto que hicisteis con niños de España y niños de Uganda, que la verdad nos pareció precioso. Primero, en 2019 pedisteis a niños de aquí que pidieran tres deseos. Después, hicisteis lo mismo con niños de la misma edad en Uganda, y, en 2021, con los mismos niños de España pero tras el confinamiento. En estos dos últimos casos, pudimos observar que los niños (en ambos casos,) sufrieron un cambio importante a la hora de elegir sus deseos.

Desde vuestra posición, ¿cómo habéis vivido vosotros este cambio?


Arnau.- Ostia, eso es mucho más fácil de preguntar que de responder.


Eric.- La verdad es que ha sido un año para reflexionar muchísimo. Un año muy creativo en muchos aspectos porque, al no tener directo, tu responsabilidad se reduce a crear. En este caso, Arnau y yo hemos estado confinados por separado porque solo nos faltaba confinarnos juntos (risas) y la verdad es que es un balance muy positivo porque nos ha servido para, bueno, investigar cada uno su mundo interior. Arnau ha compuesto sus canciones, yo las mías, y también ha servido para empezar a tocar otras ramas artísticas, yo, por ejemplo, he empezado un guión de cine. La música está tan malita que hay que buscarse la vida, y también porque siempre lo había tenido ahí en el tintero. Arnau que os cuente lo que ha estado haciendo a parte de volverse loco y subirse por las paredes (risas).


Arnau.- Yo sufrí el confinamiento completamente solo y empecé ya a hablarles incluso a las plantas (risas). Lo he llevado bien y lo he aprovechado muchísimo y yo creo que de vez en cuando, ahora es como que le he cogido el gusto a estar solo en casa épocas largas. Como también me he confinado por el típico contacto con un positivo, ya tengo mi rutina y le intento sacar el máximo provecho y verlo como una oportunidad para mejorar en todo aquello que luego no tengo tiempo y me quejo.


Laura.- Y además con el tema del coronavirus, tuvisteis suerte y os tocó justo después de acabar la gira, entonces no os afectó a nivel profesional, tanto como lo podría haber hecho ¿no?


Arnau.- Mucha, fue justo clavado. De hecho, yo recuerdo estar diciendo algo del coronavirus antes del confinamiento, en Madrid. El 13 de febrero, en un concierto, estaba haciendo alguna broma sobre el tema.


Eric.- Al cabo de unos pocos días de eso ya se empezó a expandir por Italia, y ya vimos que era un tema serio. Somos conscientes de la suerte que tuvimos y que tenemos porque muchos compañeros lo están pasando muy mal. Gente que salía con su primer disco y tenía por fin su gira soñada y anunciada y vendida no la ha podido llevar a cabo. La verdad es que llevábamos dos años sin parar de girar y quieras o no ya teníamos una parada planificada. Ahora tocaba componer el segundo álbum y bueno, agradecidos de que haya sido así.


Laura.- Ahora supongo que además el tema de montar conciertos con el coronavirus será mucho más complicado


Arnau.- Desde luego. Es difícil que alguien apueste por ti.

Es muy difícil que se pueda hacer finalmente cuando lo has previsto con tres meses de antelación y no sabes como va a estar la situación, y es incluso más difícil que la gente se atreva a venir a los conciertos. Por eso creo que tiene más mérito aún que la gente venga en la situación en la que estamos. Debido a esta complejidad e incertidumbre las entradas de los conciertos ahora cuestan más que además y la verdad es que se agradece el doble, el triple y el cuádruple que la gente venga.


Eric.- Y no solo la gente que va a los conciertos, sino también la gente que promueve la cultura y organiza eventos culturales. Ahora con la incertidumbre que hay cada día es un escenario distinto, y te puedes ver ahí con una buena enganchada teniendo que cancelar el día antes.


Laura.- ¿Os ha ocurrido alguna anécdota graciosa en algún concierto durante las giras?


Eric.- ¡Cuidado que abres la caja de pandora! (Risas)


Arnau.- Hemos pasado todo el trayecto en la furgoneta hablando de anécdotas. Todos los viajes, si son 8 horas de viaje, son 8 horas hablando sobre situaciones graciosas que hemos pasado. Pero precisamente de las 6 horas de viaje que hemos hecho, te puedo asegurar que no te podría contar ninguna anécdota. No hay ninguna sola que se pueda hacer pública y nos deje bien. Hay mucho más rock and roll después de los conciertos que en el concierto.


Eric.- La verdad es que de gira estas con 10 amigos, viajando por España, y como somos cada uno más desgraciado nos pasa de todo. Yo soy muy pájaro y una vez, por ejemplo, en la última gira, yo viajaba desde Madrid en vez de salir con la furgoneta desde Barcelona. Un chaval, que es el guitarrista y el director musical, también viajaba desde allí. Teníamos un concierto en Tenerife y llegué al aeropuerto y le pregunté dónde estaba. Él me dijo que estaba en el Starbucks y yo le dije “tío pero si no hay ningún Starbucks aquí…” . Total, resulta que me había equivocado de aeropuerto; en vez de Tenerife norte, fui a Tenerife sur. Pero bueno, por lo menos estás en la isla correcta (risas).


Laura.- Muchas de vuestras canciones transmiten mensajes sobre la sociedad con humor y alegría. ¿En rasgos generales, cuál es el mensaje que queréis transmitir con vuestra música?


Arnau.- Que la humanidad es una puta mierda. Pero lo adornamos con sarcasmo y humor y pintamos la mierda de oro, pero sigue oliendo a mierda.


Eric.- Es un buen resumen la verdad jajajaja.


Laura.- ¿Cuál es la canción que más habéis disfrutado componiendo?


Eric.- Es complicado, suena a topicazo pero son como hijos. A mi me cuesta mucho, tienes dos hijos y de repente, ¿a cual quieres más?


Arnau.- El proceso de composición de “Es gratis”, por lo menos para mí, me parece que fue el que abrió la veda de algo que es muy íntimo y muy difícil de compartir. La composición, por lo menos la letra, la haces solo y en el momento que nos juntamos y vimos que marinábamos bien, que funcionabamos bien, y que teníamos ideas parecidas fue especial. Además, tuvimos comentarios de mi padre diciendo “¡Esto es una mierda! ¡Esto suena a hippie, pero hippie mal eh! ¡Esto no funciona!” Ahí dimos con una tecla, desde luego.


Laura.- En cuanto a vuestra canción “El gusto es mío”, en vuestro caso que preferís, amor sin sexo o sexo sin amor?


Arnau.- Llegamos a una conclusión un día, ¿no? Disfruta del sexo sin amor porque el amor sin sexo ya te llegará.


Laura.- Hoy habéis venido a San Sebastián para deleitarnos con vuestras canciones, que salieron en Youtube hace unas semanas, en versión acústica. ¿Podríais explicarnos un poco este proyecto, y si tenéis alguna otra canción nueva o algún proyecto para un futuro cercano?


Eric.- Es un formato acústico pero, en realidad, tiene un poco de trampa porque venimos con dos musicazos: uno a la percusión y otro que en algunos temas toca el teclado y en otros la guitarra eléctrica. Entonces, sí que hay momentos del concierto que nos quedamos a guitarra y voz, que es tal como llegamos a la música, pero hay otros momentos que sí que suenan a banda.


Respecto a la composición, sí que tenemos bastante avanzado el siguiente álbum. No podemos dar fechas porque nos sale fatal siempre.


Arnau.- Yo ya lo estoy diciendo mucho, pero la última vez que nos hicieron la pregunta de cuándo iba a salir el álbum les contestamos que a principios de 2020 si no pasa nada, bueno, pues sí que pasó algo (risas). Como tengo la sensación de que no controlamos nada, pues prefiero no mojarnos ni un poco Lo único que espero es que no sea un disco póstumo. Con eso me conformo.